Cada pintura de Vincent Van Gogh es una pista para descifrar su personalidad y su vida, pero si quieres conocerlo mejor, saber por qué se cortó la oreja, dónde pintó La Noche Estrellada y cómo murió, te recomendamos que disfrutes estas películas que abordan diversas circunstancias de su vida y que, quizás, nunca terminarán por ser esclarecidas.
El cine ha intentado hacerle justicia ya que durante muchos años fue un desconocido, de hecho, se consideraba a sí mismo un fracasado pues en vida logró vender apenas una obra y murió sin saber lo famoso que sería. Sólo el paso del tiempo fue capaz de dar valor a las creaciones que, aún décadas después de su muerte en 1890, permanecieron ocultas.
A pesar de que solo trabajó durante 10 años, desde los 27 hasta su fallecimiento prematuro a los 37 años, Van Gogh fue increíblemente prolífico. Produjo más de 900 pinturas y muchos más dibujos y bocetos, lo que significa casi una nueva obra de arte cada 36 horas.
Estas son las películas que han intentado reconstruir la historia de Vincent van Gogh:
Van Gogh, en la puerta de la eternidad (Francia, Estados Unidos, 2018)
Nominada al León de Oro del Festival de Cine de Venecia en el 2018, Van Gogh, en la puerta de la eternidad evoca los días que el artista neerlandés pasó en Arles, ciudad francesa cuyos paisajes, además de inspirar gran parte su obra, fueron testigos de la ambivalente relación que entabló con el pintor Paul Gauguin. El filme, dirigido por Julian Schnabel, también explora sus últimos días de vida en Auvers-sur-Oise, Francia, envuelto en sus problemas mentales, pero respaldado por la fraternidad de su hermano menor Theo.
A través de la cámara subjetiva, Alexander Barnett, escritor y director de The Eyes of Van Gogh, especula en torno a la cruda visión que Van Gogh pudo tener del mundo tras su dolorosa relación con Paul Gauguin y durante los doce meses que el pintor neerlandés pasó en un manicomio de manera voluntaria. Este filme es una evocación vívida de los pensamientos y sentimientos que pudieron marcar ese periodo en la vida del artista.
Cartas de Van Gogh, (Reino Unido, Polonia, 2017)
Escrita y dirigida por la cineasta polaca Dorota Kobiela y el director inglés Hugh Welchman, Cartas de Van Gogh es un hito del cine animado, pues es la primera película hecha a partir de pinturas al óleo. En 65 000 fotogramas de cuadros al óleo, este filme narra la encomienda que tiene Armand, hijo mayor de la familia Roulin, de entregar a Theo Van Gogh la última carta escrita por su hermano Vincent. En su travesía, Armand se encuentra con personas que convivieron con el artista en sus últimos días, y cada testimonio lo lleva a escrutar las circunstancias en las que el artista neerlandés murió.
Vincent y Theo, (Reino Unido, 1990)
Producida originalmente para la televisión inglesa en 1990, Vincent y Theo se popularizó en su formato cinematográfico. El filme, protagonizado por Tim Roth, se centra en los altibajos de la dupla Van Gogh: conformada por el pintor postimpresionista y su hermano menor, Theo, cuya relación estuvo siempre marcada por el explosivo temperamento de Vincent y la devoción que Theo le tuvo a él y a su obra. Este filme, dirigido por Robert Altman, desdobla las personalidades de los dos Van Gogh, tan antagónicas como complementarias.
Sed de vivir, (Estados Unidos, 1956)
En 1956, la exitosa novela biográfica Sed de vivir, escrita por Irving Stone, tuvo su adaptación cinematográfica, protagonizada Kirk Douglas, cuya actuación le valió una nominación al Oscar como mejor actor. El filme homónimo, dirigido por Vincente Minnelli, compendia los fallidos intentos de Van Gogh por sostenerse económicamente, sus lastimosos romances, su pasión por la pintura, el encuentro con los impresionistas en París y algunos de los episodios más duros de su inestabilidad mental que marcaron sus últimos años de vida.
Van Gogh, (Francia, 1991)
Dirigida por el cineasta francés Maurice Pialat, Van Gogh se sitúa en la primavera de 1890, fecha en la que el artista llegó a Auvers-sur-Oise, ciudad francesa donde le aguardaban sus últimos 67 días de vida. Este periodo de tiempo estuvo marcado por el desprecio a su propia obra; la cariñosa amistad que entabló con el doctor Paul Gachet; los lazos románticos que tuvo con la hija del médico, Marguerite Gachet, y con Cathy, una prostituta parisina; así como los conflictos que rodeaban su relación con su hermano Theo y su esposa Johanna. Van Gogh es también reflejo de la constante obsesión del pintor por plasmar en colores su visión de la realidad.
Vincent y yo, (Canadá, 1990)
El legado de Van Gogh, mucho más allá de inspirar lúgubres películas biográficas, ha sido fuente de inspiración para muchos creadores, pero también ha alimentado la ambición de muchos estafadores. En su película Vincent y yo, el director australiano Michael Rubbo se amarra a estos sucesos para dar vida a la historia de una joven que sueña con conseguir una beca para estudiar arte y convertirse en una gran pintora como su ídolo, Van Gogh. Pero antes debe perseguir a un comerciante de arte que ha puesto a la venta, por millones de dólares, los dibujos de la joven, anunciándolos como “los primeros dibujos de Van Gogh”. Mediante la fantasía y la aventura, Vincent y yo evoca el pasado y el presente en torno a la figura del mítico pintor postimpresionista.
Con información de GatoPardo