Ahora que se dio el tarifazo al transporte público de seis a ocho cincuenta varitos, valdría la pena hacer una sección de preguntas y respuestas -con música de fondo de la Romántica o la Qué bonita 9.20, entre más cursi mejor- para tratar de explicar qué es lo que va a pasar con esta medida que aunque se justifique no es popular.
1.-¿Era necesario subir el costo del pasaje?
R: Sin duda, desde hace más de diez años que no se ajustaba el costo del transporte público. Los gasolinazos -gracias al PRIAN por tanto esfuerzo-, la inflación, el nulo crecimiento económico y con la recesión provocada por Morena, era impensable que esto no ocurriera. Aún así, el aumento está dentro de los límites pues hay estados de la República en el que es un verdadero robo. Puebla se mantiene con un costo bajo a comparación de otras entidades.
2.- ¿Tienen razón los panistas y los diputados de ese partido en tirarse al piso?
R: Pueden hacer los berrinches que quieran y serán con miras al proceso electoral del 2021. Carecen de autoridad moral en el sentido de que ellos promovieron los gasolinazos y porque por una lucha de egos, el panista Moreno Valle a fin de no generarse una mala imagen le dejó esa responsabilidad a Tony Gali, este por su parte no quiso aumentarlo a pesar de las presiones del morenovallismo.
Guillermo Pacheco Pulido tendría que haber subido la tarifa del pasaje pero gracias al error de Carlos Urbina Tanús, que le costó el puesto antes de asumirlo, le regaló el pretexto perfecto para aventar la papa caliente a Miguel Barbosa.
3.- ¿Afectará esta medida a Morena en el proceso electoral del 2021?
R: No, en México lo que se carece es de memoria histórica. Y aunque sí afecta los bolsillos de todos los poblanos, la realidad es que en dos años estaremos atentos a otros factores. Hay medidas gubernamentales que son impopulares pero eso es parte del ejercicio del poder. En este momento habrá quien se queje y se moleste -con sus razones- pero pasará. Moreno Valle privatizó el agua potable. Ese sí fue un crimen contra los derechos humanos de los poblanos y ya ven cómo se las gastaban.
4.- ¿Los concesionarios del transporte cumplirán su promesa de mejorar sus unidades y capacitar mejor a sus choferes así como hacer una selección de calidad en sus operadores?
R: No lo creo. No lo creo y no lo creo. Debemos guardar el seis de octubre del 2019 para ver quienes cumplen y quiénes no lo hacen. Y no lo creo porque actúan como el marido que le dice a su mujer que ahora sí le será fiel para toda la vida. Actúan como los políticos que prometen y nada que cumplen, como los estudiantes que dicen que el próximo mes ahora sí van a estudiar y reprueban.
Es parte del show y las promesas que al final se convierten en mentiras. Además, los concesionarios van a seguir como millonarios y los choferes seguirán jugando carreritas -pese a su pasaje- con tal de cumplir con la cuota diaria y entregar la unidad con el tanque lleno.
Ahora sí van a cumplir. ¡Bah! ¡Pamplinas!
5.- ¿Se acabó el que viaja de palomita o mosca?
R: No. Nunca. Es más fácil que pase un camello por el ojo de una aguja, diría La Biblia.
Ser o no ser he ahí el espaldarazo.
El rector de la BUAP recibió dos mensajes que le cayeron como un bálsamo el viernes pasado: el presidente de la República dijo en su mañanera que él respetará la autonomía universitaria y, por otra parte, su esposa, Beatriz Gutiérrez Müeller no solo le levantó la mano a Alfonso Esparza Ortiz al término de su Segundo Informe de labores al frente de la casa de estudios, sino que se despidió de él de una manera muy afectuosa.
Si la esposa del presidente de la República asiste a un evento en Puebla como es el del informe del rector de la BUAP hay que entenderlo como una señal de respaldo. Nunca la esposa de un mandatario se arriesgaría a salir en la foto con alguien que tenga problemas reales, fiscales y legales.
El costo sería altísimo y en Presidencia deben tener el verdadero pulso (carpetas) de lo que sucede en Puebla.
No van a poner en peligro la imagen de la primera dama (que no le gusta que le digan así, por cierto).
En política todo lo que ocurre son señales. Y si bien lo que haga doña Beatriz Gutiérrez es muy a título personal, la forma es fondo.
Diría Germán Sierra: “la pinche señal”.
Así como también fue una señal que los diputados de Morena y algunos alcaldes de ese partido no asistieran. Ese vacío también fue interpretado y leído por quien debe analizar lo que pasa en la máxima casa de estudios del estado.
El rector fue políticamente correcto en su informe, pues jamás quiso responsabilizar a nadie de las acusaciones que le ha hecho el constructor Mario Mendívil y su abogado Javier Coello Trejo.
Sólo dijo que de los temas legales se hacía responsable él y de la defensa de la autonomía, todos. En pocas palabras, evitó entrar en confrontaciones con otros actores políticos.
Después de todo, su segundo informe fue todo un éxito.