Roberto Ramírez de la Parra, director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) anunció que para el 2018 se iniciará un proceso de saneamiento del Río Atoyac con un presupuesto inicial de 300 millones de pesos. Sólo hasta el final del sexenio federal se dio prioridad a un tema que en Puebla y Tlaxcala es desde hace años un grave problema de salud.
Esta es apenas la segunda ocasión en la historia en que se plantea el rescate del cuerpo fluvial; la primera fue en 1996, justo a la mitad del sexenio de Manuel Bartlett Díaz y, a partir de ahí, hasta el gobierno de Rafael Moreno Valle se han invertido más de 5 mil millones en su recuperación sin que se logren resultados reales.
En 2006 el Tribunal Latinoamericano del Agua emitió su veredicto final sobre el Atoyac reconociéndolo como un peligro para la salud de quienes viven a su alrededor. Lo anterior debido a las descargas industriales y de drenajes domésticos y comerciales que vierten su contenido en él. Su polución, sin embargo, es un proceso que inició desde hace más de 180 años, en 1835, con el apogeo de la industria textil en Puebla.
Sobre el tema de los más de 5 mil millones de pesos que se han «invertido» en su rescate en los últimos 22 años, es casi imposible tener transparencia pues al ser 22 municipios poblanos por los cuales discurre, cada uno de ellos ha hecho las cuentas «a su manera» al momento de ocuparse del río. En cuanto al aspecto empresarial, los números son aún más turbios, pues el funcionario explicó que «no siempre es claro saber con precisión dónde es que cada una de las empresas vierte sus desechos, por lo que no es tan fácil aplicar las sanciones correspondientes».
La primera etapa de esta nueva recuperación comenzará del lado de Puebla en la Presa Manuel Ávila Camacho, también conocida como Presa Valsequillo, otro cuerpo de agua que de igual forma guarda un pasado turbio (literal y metafórico) en cuanto a su contaminación y posteriores intentos de saneamiento. La administración tlaxcalteca, por su parte, también podrá tener acceso a los recursos de Conagua siempre y cuando presente un proyecto que pueda conjuntarse con la iniciativa de Puebla. El gobernador José Antonio Gali Fayad ha anunciado que se aplicará tecnología de punta para el rescate del río, la cual podría contar con el apoyo de científicos extranjeros.