Cada estado de la República tiene tradiciones navideñas que los caracterizan, no sólo por las tradiciones sino por lo que se acostumbra comer en Nochebuena.
Y así como en casi todo el centro de México, en Puebla se preparan romeritos para la cena de Navidad, pero en la versión de este único estado se le agrega mole poblano.
El Bacalao es más bien un platillo tradicional de Veracruz, pero los poblanos lo han adoptado y cambiado un poco la receta. Así que mientras que en el estado costeño se prepara desmenuzado con cebolla y ajo, en Puebla se sofríe completo con una salsa de jitomate y albahaca.
Seguro lo que más demuestra ser un platillo poblano son los Chipotles dulces, que se preparan con piloncillo, pimienta, y laurel. Dicen por ahí que si no has comido chipotles dulces capeados en la cena de Navidad, no eres un poblano completo.
Una prueba de que cada región tiene platillos y tradiciones características es que en Yucatán se prepara Cochinita Pibil, un cerdo en salsa de chile habanero, col blanca, naranjas, sal y cilantro. Mientras que en el norte del país, lo más común en las cenas navideñas son los tamales. Y en las zonas costeras es común que se consuman pescados grandes en la Noche Buena.
También en Chiapas, los tzotziles de Zinacantán comen dulce de calabaza frente al atrio de las iglesias del 16 al 26 de diciembre para conmemorar los nueve meses de embarazo de la Virgen.