Martin Scorsese cumple 79 años de edad, y parece que el tiempo y la energía no pasan por un genio que ha conseguido contagiarnos su entusiasmo y pasión por el cine.
Durante mucho tiempo en su carrera como director no se había podido llevar el Óscar como Mejor realizador y parecía que nunca lo haría, pero fue con el remake de una película de Hong Kong que lo lograría, y sobra decir que de paso superó por mucho a la película original.
No es fácil hacer una selección, pero te vamos a recomendar las películas más icónicas para que disfrutes el talento inigualable de este director, guionista y productor de cine estadounidense:
La edad de la inocencia (1993)
Sin duda, una de las películas que más sobresalen entre la filmografía de Scorsese. Basada en la novela de 1920 de Edith Wharton, La edad de la inocencia está situada en la alta sociedad neoyorquina del siglo XIX y sigue la historia de un abogado comprometido que se enamora de una mujer separada de su esposo. La cinta ganó el Oscar a Mejor diseño de vestuario y le dio nominaciones a Winona Ryder (Mejor actriz de reparto), a Scorsese y Jack Cocks (Mejor guión adaptado), Mejor dirección de arte (Dante Ferretti y Robert J. Franco) y Mejor música original (a Elmer Bernstein).
Calles peligrosas (1973)
Aunque no fue su primer largometraje, sí es el primero enteramente creado por Scorsese, quien basó el guion de Mean Streets en las historias y eventos que rodearon su niñez en Nueva York. La película protagonizada por Harvey Keitel y Robert De Niro gira alrededor de Charlie (Keitel), un joven que, para ayudar a su amigo Johnny Boy (De Niro), se inmiscuye entre el bajo mundo de la mafia italiana neyorquina.
Pandillas de Nueva York (2002)
Nueva York a mediados del siglo XIX. Por supuesto que uno de los cineastas que mejor ha retratado a la Gran Manzana tendría que producir una de las mejores cintas sobre sus inicios. La película cuenta la historia del vecindario conocido como Five Points, donde los diversos grupos de migrantes que eventualmente formarían la identidad de aquella isla apenas comenzaban a interactuar. Destaca, por supuesto, que esta es la primera colaboración entre Leonardo DiCaprio y Scorsese y la extraordinaria actuación de Daniel Day-Lewis como el malvado líder de pandillas Bill, «El Carnicero» Cutting, por la cual fue nominado al Oscar.
The King of Comedy (1982)
A pesar de que la mayoría de sus películas tienen momentos hilarantes, Scorsese no es un cineasta a quien se le asocie de manera particular con la comedia. Sin embargo, en ésta su lado más oscuramente chistoso sale a relucir de la mano de Robert De Niro y Jerry Lewis. En ésta cinta nominada a la Palma de Oro en Cannes en 1983, De Niro interpreta a Rupert Pupkin un fanático y aspirante a comediante que está Un con el presentador de un show televisivo nocturno llamado Jeryy Langford (Lewis). Las ganas de triunfar de Pupukin son tan grandes, su talento tan mínimo y su obsesión tan grande, que su solución es «obligar» a su ídolo a hacerle caso.
La isla siniestra (2010)
Una de las mejores películas de Martin Scorsese. Basada en la novela Shutter Island de Dennis Lehane publicada en 2010, La isla siniestra cuenta la historia de un agente federal (Leonardo DiCaprio) que es enviado a una institución psiquiátrica para investigar la desaparición de un paciente que ha escapado misteriosamente de su celda. La película es un thriller de misterio y Scorsese demuestra su extraordinaria maestría para coordinar cada uno de los elementos narrativos de forma en que la verdad detrás de los hechos no se revela hasta el momento preciso, a pesar de que ha estado frente a nuestros ojos todo tiempo.
Casino (1995)
Aunque se ha demostrado lo contrario, es un argumento común decir que el género en el que mejor se desenvuelve el realizador es el drama criminal. Y con ejemplos como Casino, una de las mejores películas de Martin Scorsese, es fácil saber por qué es tan alabada dicha faceta de su carrera. Con un reparto conformado por Robert De Niro, Sharon Stone y Joe Pesci, esta cinta nos presenta a Sam Rothstein, maestro de las apuestas y, como el nombre lo dice, dueño de un casino que tiene ligas con la mafia. Es un gran retrato de las turbias relaciones de poder que hay en las ciudades.
El lobo de Wall Street (2013)
De vez en cuando en la carrera de un cineasta, éste crea una película para la que parece haberse estado preparando toda su vida. Este es el caso de El lobo de Wall Street, una cinta que prácticamente junta todo lo mejor de la carrera de Scorsese en una extravaganza de intriga, comedia, acción, espectaculares secuencias cinematográficas y duelos de actuación de tres horas de duración que, francamente, se van como el agua. Leonardo DiCaprio interpreta a Jordan Belfort, un joven ambicioso y egoísta que explota al máximo la burbuja ochentera de las inversiones y acciones. Nominada a cinco Oscares (aunque no se llevó ninguno), no sólo nos entrega una de las mejores películas de Scorsese y DiCaprio, sino que nos presentó a una fantástica Margot Robbie y a las habilidades histriónicas (fuera de la comedia) de Jonah Hill.
Toro salvaje (1980)
Basada en las memorias del boxeador Jake LaMotta (Raging Bull: My Story), Toro salvaje es fácilmente uno de los grandes hitos de la cinematografía norteamericana. Además de la fineza y elegancia con la que Scorsese dirige una historia violenta, la película se estrenó en un momento histórico en el que el cine (particularmente el norteamericano) parecía estancado y resuelto a no innovar. Scorsese (y, en gran medida, su editora de cabecera Thelma Schoonmaker), dan una clase maestra de cómo romper las reglas de la narrativa para prácticamente crear una nueva forma de contar historias. Además de llevarse dos Oscares (Mejor actor para Robert Re Niro y Mejor edición para Thelma Schoonmaker), la película fue incluida en el National Film Registry (que se encarga de preservar obras de gran valor cultural, histórico o estético) apenas diez años después de su estreno.
Buenos muchachos (1990)
«Desde que tengo memoria, siempre he querido ser un gangster», dice el primer diálogo en voz en off de Henry Hill (Ray Liotta) al comenzar esta épica sobre el crimen organizado. Con sus casi dos horas y media de duración, uno de los aspectos más impresionantes de Buenos muchachos es el dinamismo y constante ritmo que logra mantener. Esta hilarante y cruda mirada a la historia verdadera de un chico que logra subir desde el peldaño más bajo del crimen organizado a la cima, es un clásico instantáneo y una de las mejores películas de Martin Scorsese.
Los infiltrados (2006)
El único Oscar a Mejor director que tiene Martin Scorsese hasta el momento. Aunque seguramente debió haber ganado mucho antes, el director por fin se llevó la presea por esta historia –adaptada de una cinta hongkonesa llamada Infernal Affair– sobre un policía inflitrado en la mafia irlandesa de Boston, y un miembro de esa mafia infiltrado en la policía de Boston. Este magnífico juego del gato y el ratón está llena de intenciones ocultos, giros de tuerca y un verdadero duelo de actuaciones entre Leonardo Di Caprio, Matt Damon, Jack Nicholson y Mark Wahlberg, quien fue el único actor de la película en recibir nominación al Oscar.
Taxi Driver (1976)
La trama es sencilla: un veterano de la guerra de Vietnam (Robert De Niro) que pasa sus noches disertando sobre la decadente sociedad moderna mientras maneja un taxi por las calles de Nueva York, decide que es su misión salvar a una jovencita prostituta (Jodie Foster). Sin embargo, la película escrita por Paul Schrader es mucho más que eso, pues a través de un tono sombrío y disertaciones filosóficas recitadas magistralmente en voz en off por el mismo Robert De Niro, la película se convierte en un estudio sobre la soledad en una realidad que parece más interesada en las cosas y las apariencias que las personas. «No creo que uno debería dedicar su vida a la atención mórbida a sí mismo, uno debería poder volverse persona igual que la demás gente», dice el Travis Bickle de De Niro. Imperdible.
El irlandés (2019)
La épica criminal de Scorsese es también su cinta más reciente, y la primera distribuida por un servicio de streaming, pero eso no es lo que la hace más destacable. Vale la pena revisarla por las magistrales actuaciones de De Niro, Pesci y Pacino -y por ser el regreso del realizador al género que lo catapultó a la fama-. El filme, nominado a 10 premios de la Academia, narra el ascenso de Frank Sheeran, de conductor de autobús a matón para la familia Bufalino, de la mafia de Pensilvania, así como sus alianzas con Jimmy Hoffa. Desde su estreno en el Festival de Cine de Nueva York, en 2019, capturó a propios y extraños. Además, apareció como primer lugar en la lista de numerosos críticos el año en el que se estrenó.
Con información de Cinepremiere