El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó la reunión del Gabinete de Seguridad y la conferencia matutina en el hangar de la Fuerza Aérea Mexicana, donde se encuentra el avión presidencial en tanto se concreta su venta.
“Para que no haya duda, malas interpretaciones. El propósito de hacer esta rueda de prensa con el avión de fondo es para dar a conocer al pueblo de México cómo se malgobernaba al país, cómo había lujos en el gobierno durante todo el periodo neoliberal. Se le daba la espalda al pueblo, sobre todo a la gente humilde, a la gente pobre, y los altos funcionarios vivían colmados de privilegios, de atenciones. Era un gobierno de ricos, para ricos, con un pueblo pobre. Ese fue el distintivo de los gobiernos neoliberales”, remarcó.
“Este avión es un ejemplo de los excesos que se cometieron. Se iba a terminar de pagar por este avión cerca de 7 mil millones de pesos, que fue un financiamiento. Nada más el costo de mantenimiento, de viajes al año, significa alrededor de 150 millones de pesos”, agregó.
El jefe del Ejecutivo recordó que si se hubiera construido el aeropuerto de Texcoco, se tendría que desmontar el hangar de la Fuerza Aérea Mexicana en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el cual costó casi mil millones de pesos.
“Acabo de inaugurar una ampliación en este aeropuerto, costó 500 millones de pesos. Esto lo cobraron en mil millones”, acotó.
Aseguró que continuará el plan de austeridad republicana para acabar con los lujos, el derroche y la corrupción.
“El presupuesto es dinero del pueblo y se va a destinar siempre a apoyar a la gente que más lo necesita para garantizar el bienestar de nuestro pueblo”, enfatizó.
El director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Alberto Mendoza Sánchez, informó que el pasado 20 de julio se recibió un depósito de un millón de dólares por parte de un posible comprador del avión presidencial. Actualmente hay dos candidatos para adquirirlo.
Destacó que el mantenimiento de la aeronave ha estado a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional y la empresa fabricante Boeing.
“Me atrevería a decir que, al transcurrir un año y siete meses, la aeronave se encuentra en mejores condiciones de como la recibimos”, comentó.
Durante su estancia de 19 meses en Victorville, California en Estados Unidos, el costo de preservación de la aeronave TP-01 fue de 1.7 millones de dólares.
El avión presidencial es un modelo Boeing 787-8; fue fabricado en 2010 y adquirido por Banobras al término del gobierno de Felipe Calderón en 2012. Posteriormente lo utilizó Enrique Peña Nieto.
Tiene una capacidad de 80 pasajeros más tripulación y cuenta con más de mil 702 horas de vuelo.
Banobras encabeza el proceso abierto y competitivo de venta con el acompañamiento de la Oficina de Transparencia de las Naciones Unidas a precio de mercado.
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, presentó un comparativo del promedio mensual de gastos de operación del avión. En la pasada administración era de 12 millones de pesos y en la actual a 3.9 millones de pesos.
Dijo que si el avión se hubiera quedado en México los 20 meses del actual gobierno, se habrían gastado 160.67 millones de pesos a diferencia de lo erogado en Victorville, lo que significa un ahorro de 82.1 millones de pesos.
El director general de la Lotería Nacional para la Asistencia Pública, Ernesto Prieto Ortega, detalló que se han vendido un millón 530 mil 800 boletos para el sorteo de cien premios de 20 millones de pesos cada uno, que equivalen a 2 mil millones de pesos.
Los ingresos por la venta de ‘cachitos’ al 24 de julio suman un total de 765.4 millones de pesos. El sorteo se realizará el próximo 15 de septiembre a las 16:00 horas.
El presidente López Obrador recordó que lo recaudado se destinará al fortalecimiento de la infraestructura de salud y equipo médico.