Cualquiera que haya cargado la mochila de un escolar sabrá que de no contar con pesas, es una buena opción para hacer músculo. Sin embargo, resulta increÃble cómo los niños y jóvenes cargan estos pesados equipajes durante varios años y no terminan en el hospital con un desgarramiento en la espalda. Además de libretas y lapiceros, los educandos llevan allà el almuerzo, el instrumento musical, los aditamentos deportivos y hasta alguna novedad de contrabando para presumir a sus compañeros.
De este modo, no deberÃa sorprendernos que una mochila escolar promedio supera por mucho los 5 kilos de peso. Las cosas se complican cuando nos enteramos de que este aditamento no deberÃa superar el 15% de la masa corporal de quien lo porta, es decir que una mochila con los mencionados 5 kilos de peso es apta sólo para los niños que superan los 33.3 kilos de masa corporal y no menos.
Teniendo en cuenta este panorama no es una sorpresa que la Asociación Mexicana de PediatrÃa alerte cada vez más sobre los casos de problemas posturales en niños y preadolescentes . Es de consideración, también, que los padres que cargan las mochilas de sus hijos sufran con más frecuencia de este tipo de problemas y se agraven con la edad.
Los pediatras recomiendan que si se lleva la mochila a la espalda, esta debe ir cargada sobre los dos hombros y con el peso bien repartido. Las variantes de «carrito» pueden ser de utilidad si también el peso es prudente y no se va a transitar por un terreno irregular.
¿Qué se puede hacer para disminuir el peso de las mochilas?
- Algunas editoriales educativas han sugerido imprimir los libros por bimestre o cuatrimestre, sin que la medida se halla llevado a cabo, debido, sobre todo al alto costo en papel y menor control en la repartición de los ejemplares.
- Otra medida que en alguna época fue cotidiana es la implementación de una sola carpeta dividida por separadores para cada materia en lugar de una gran libreta para cada una de las mismas. Los problemas aquà se han presentado cuando los profesores alegan que los jóvenes «no llevan un buen control de las hojas referentes a cada asignatura».
- La disminución de tareas en casa ha sido otra opción, sin embargo el sistema educativo se ha anquilosado en la idea de llevar la escuela al hogar de los alumnos y ahà queda todo.
- La disposición de «lockers» o casilleros en las escuelas para guardar los instrumentos artÃsticos y deportivos es otra medida que se ha sugerido, pero la falta de espacio y de seguridad en los planteles ha mermado esta idea.
Formas de aligerar el peso de lo que cargan los niños y jóvenes, pero la voluntad de escuelas y padres de familia es lo que ha faltado de forma notable. De implementarse estas medidas, los especialistas afirman que los estudiantes tendrÃan un mejor rendimiento, pues si fÃsicamente se siente bien, ello se verÃa reflejado en su desempeño intelectual.