La historia es así: en abril de 1987 Nicanor Parra aprovechó las inundaciones que sacudieron la nación chilena para componer un poema largo titulado “Temporal”, donde buscó impregnarse del que llamaba “el lenguaje de la tribu”, es decir, la combinación entre la calle, la feria y la academia.
En aquellos años, consultado sobre el tema, el antipoeta decía que tenía “la necesidad impostergable de ser no sólo la voz de la tribu, sino la conciencia de la tribu, porque en último término lo que me interesa es la crítica social”.
Sin embargo, el texto terminó traspapelado durante 26 años, sin que el artista lo encontrara nunca, y se creyó perdido todo este tiempo. Hasta el 2013, cuando Adán Méndez, hombre de confianza del antipoeta, encontró, en una casualidad muy “parriana”, una entrevista que éste dio en 1988 al crítico literario René de Costa, donde, cosa curiosa, leía dos veces el poema completo.
“Trabajo hace unos años en la edición de las conversaciones de Nicanor Parra con René de Costa. En esas grabaciones apareció el poema. Parra me había hablado mucho de él, y cuando se enteró que apareció quiso que se publicara casi de inmediato, algo muy raro en él”, cuenta Méndez.
El caso es que “Temporal” finalmente se editó como libro, en lo que para Méndez es de un gran valor, en especial considerando que se hizo en los albores del centenario del antipoeta, en 2014.
“Es un gran poema. Como testigo de la época puedo asegurar que, además de sus estrictos valores poéticos, es un documental sobre época siniestra, cuyo origen Parra rastrea hasta la colonia al menos. Parra señala por primera vez la mala relación del hombre con la naturaleza como el problema político fundamental”, dice.