Para algunas empresas este proyecto les resulta muy atractivo, ya que las máquinas no se quejan, enferman, no piden aumentos y, sobre todo, no tienen vacaciones, por lo que los jefes podrían preferirlos encima de los humanos, quienes sí requieren de descansos.
Pero, por mucho que un robot tenga un software súper revolucionado, ¿podrá con las habilidades que tiene un humano? Como la creatividad, la empatía, calidez y pasión que presenta por su trabajo. ¿Tú que prefieres?
Soy totalmente Robot
Combinando tecnologías como Inteligencia Artificial y el Internet de las cosas, Intel México ha creado un robot capaz de usar lenguaje natural para interactuar con personas que estén interesadas en comprar una computadora en el piso de ventas de Palacio de Hierro. De ser exitoso este experimento podría replicarse en otros departamentos y ofrecer otro tipo de productos; pues Intel asegura que con el entrenamiento adecuado (de los algoritmos de inteligencia artificial) puede funcionar en otro tipo de industrias, aunque no sea de manera móvil, sino en un kiosko, por ejemplo.
Parte de este experimento está motivado por el futuro cercano, que respalda el informe Generación Z como futuros clientes, 2027 de la consultora Frost & Sullivan, y que señala que los clientes de esta generación se sentirán más cómodos con la idea de robots autónomos, dado que son la primera generación que nació y creció en la era de Internet y la tecnología.
Este robot, que Intel llama simplemente Robot, puede moverse de manera autónoma y cuenta con una pantalla táctil en la que se lleva a cabo el proceso de elección de la computadora de acuerdo con los gustos y las necesidades de la persona con la que esté interactuando.
Robot puede acceder a la información del inventario y saber la disponibilidad del producto en la tienda, y dirigir al cliente al área donde se encuentra el equipo, o directamente con un vendedor. Además de la pantalla, el equipo contiene una computadora tipo NUC de Intel, y cámaras de la misma marca con su tecnología de profundidad RealSense, que puede identificar el entorno físico para lograr moverse de manera independiente sin necesidad de ayuda humana. Además, posee un sistema de asistencia remota por videollamada para que los clientes sean atendidos a través de su pantalla táctil por un asistente, desde un call center.
Por la escalabilidad del proyecto, este tipo de soluciones se puede implementar en otras industrias, y se tiene contemplado que los asociados de Intel puedan adquirir los elementos para hacer su propio robot, usando diferentes perfilamientos de usuarios para otro tipo de tiendas o industrias.
En este primer robot, que está funcionando en la tienda Palacio de Hierro de Polanco, en la Ciudad de México, se usó la ayuda del integrador Octopy, una empresa mexicana que trabaja con robótica e Inteligencia Artificial.
Ejecutivos de Intel México presentaron este proyecto como una colaboración en la que participaron todos los departamentos en sus oficinas de la CDMX junto con Octopy, y en la que toman en cuenta no solamente los aspectos comerciales para lograr las ventas, sino la seguridad de los datos de los consumidores de acuerdo con sus políticas de privacidad.
Un estudio realizado por Boston Consulting Group señala que el mercado mundial de la industria de la robótica alcanzará los 87,000 millones de dólares en 2025, de lo cual, más de la mitad se destinará al mercado de las ventas minoristas.
Con información de Expansión