Por Carlos Peregrina
De un tiempo a la fecha, programas de televisión, periódicos, revistas y libros de autoayuda han promovido ideas, cursos, seminarios, programas que tienen un único fin: sacar dinero. La promesa: la felicidad, el bienestar y el éxito económico.
Es muy fácil caer en esos grupos que parecen sectas. A veces son hasta sistemas multinivel, pirámides o venta de criptomonedas que promueven un montón de pseudoterapias, y si alguien no obtiene el éxito deseado, es la culpa del usuario, no del método.
Aquí les dejamos algunas de las palabras que se utilizan para hacer víctimas a los que se integran a estos proyectos. No se trata de avergonzar a nadie que ha caído en ellos, los entendemos, algunas veces nosotros también hemos sido víctimas, porque el pensamiento de lograr un bienestar emocional y económico es algo legítimo, lo que no lo es son los grupos que se aprovechan de la debilidad del ser humano.
Programación Neurolingüística (PNL)
Es una pseudociencia creada en 1970 que consiste en reprogramar el pensamiento, el lenguaje personal y de ahí el comportamiento. La gran farsa de esta terapia es que primero utilizan la palabra “neuro” para definirla como una ciencia, cuando ya hay estudios que desacreditan ese pensamiento.
Segundo: algunos “terapeutas” la utilizan como hipnosis. Tercero: aseguran que pueden curar en una sola sesión ansiedad, depresión, fobias y hasta TDAH y una larga lista de problemas emocionales.
Al final, solo se busca que la persona se sienta culpable de sus propios pensamientos, lo nulifican. Y si existe algo más puro de la persona es su pensamiento y su libertad para hacerlo.
Risoterapia
Hay empresas que hacen sesiones para sonreír y carcajearse por más de 10 minutos, ya que supuestamente así mejorarán sus emociones y su productividad; se eliminarán problemas laborales y tomarán mejores decisiones.
El problema es que no hay un estudio científico que avale dicho planteamiento. Claro está que no está mal reír o sonreír, pero no puede ser impuesto ni obligatorio, ya que se está forzando a alguien a sentir o a hacer algo contra su voluntad.
No se ha demostrado que reír haga que una persona gane más dinero o que su esposa no le sea infiel. No es magia.
Pensamiento mágico
La vida del ser humano es compleja por naturaleza; hay buenas y malas experiencias. Hay momentos inolvidables y algunos que no queremos recordar, pero algo es cierto, no se le puede atribuir a los horóscopos ni a la lectura del tarot, ni a la brujería que las cosas cambien solo porque sí.
No se puede, incluso, afirmar que porque hay gente que tiene envidia, bloquearán nuestras capacidades para alcanzar o hacer algo. No es cierto que solo porque una persona decreta algo se cumplirá.
Porque creer ciegamente en ello provocará una enorme frustración. Si conoces a alguien que promueva ello, date la vuelta y sal corriendo.
Biodescodificación
Existe otra pseudociencia que afirma que todas las enfermedades son provocadas por las emociones. Una cosa es que hay enfermedades psicosomáticas y otra muy distinta a que todas las emociones “negativas” provoquen enfermedades.
Si tienes una gripa muy fuerte es producto de una pérdida emocional, si una persona tiene una infección en sus vías urinarias es que siente una pérdida de control en su casa. Si una persona es muy rencorosa resulta que sufrirá de cáncer porque se guarda sus pensamientos y emociones.
Esta visión solo victimiza a una persona. Seamos objetivos, una persona que está enferma de algo muy delicado, difícilmente se sentirá bien.
Lo que crees es lo que creas
Otra vez, regresamos a la misma cantaleta. Hacer responsable a las personas de estar enfermas, no conseguir trabajo, no aumentar sus ventas, sentirse solo. Porque no siempre lo que crees es lo que creas.
Se vale estar triste, enojado, angustiado, con miedo. Eso es natural de la persona y las emociones son reacciones a situaciones de la vida misma. Lo que provocan esas visiones es mayor culpa del ser humano y, por ende, mayor preocupación, no aceptación propia, y lo llevan a un terreno que le puede causar muchos trastornos mentales.
Nuevamente, hay personas que dicen que una persona solo con cambiar sus pensamientos puede curar hasta el cáncer. Si tienen pensamientos positivos generan salud positiva, si tienen pensamientos negativos, generan situaciones dañinas para su cuerpo.
Solo los mediocres ponen excusas
Cuando estás inmerso en cualquier tipo de taller, grupo religioso, secta, organización, coaching coercitivo (cuántico), te aseguran que si no participas con ellos eres un mediocre, si no compras sus cursos, si no asistes a sus seminarios eres un mediocre.
Y son tan repetitivos que lo que provocan en la persona es que dude de sí misma, y si en un momento una persona cuestiona su sistema, inmediatamente es señalada como alguien que no se atreve a soñar.
Todos los problemas que tienes están en tu mente
La mayor parte de los coaches que cobran casi 100 mil pesos por impartir en cursos sus teorías de felicidad y éxito te aseguran que no importa el contexto: país, gobierno, economía, salud, familia, cultura.
Lo que está mal es tu mente. Algunos de ellos aseguran que lo mejor es lavar tu cerebro, cambiar tu paradigma, cambiar toda tu forma de pensar.
El estado de ánimo importa más que el conocimiento
Para muchos promotores de la felicidad —coaches, gurúes, maestros, terapeutas—, solo con estar animado puedes obtener lo que sea. La ciencia es demasiado para ellos, el estudio es aburrido. Tanta información satura.
Suena gracioso, pero es verdad. Solo con tener un buen estado de ánimo lograrás lo que quieras: incluso, viajar al espacio como Elon Musk. No es que subestimemos el estado de ánimo, este motiva a hacer algo, pero no todos los días las personas están animadas. Esto es más profundo y no esta visión reduccionista del pensamiento mágico.
Peligro de sectas
La felicidad y el pensamiento positivo se puede convertir en tóxico. Todos los seres humanos buscamos bienestar y superarnos. Nos encanta triunfar, el problema es que ante ciertas situaciones de vulnerabilidad o debilidad, cualquier ideología que busca apropiarse de las personas y de su dinero, se aprovechen.
En un momento de vulnerabilidad cualquier situación puede ayudar, pero si es con el fin de sacar dinero, esclavizar, maltratar y, en ocasiones, hasta abusar sexualmente.
Uso de la palabra “neuro”
Usan neurociencia, neuomarketing, neurolingüística, pero de neuronal no hay nada. En muchos de esos movimientos promotores de la felicidad, lo único que hay es ideas que no se basan en ciencia, solo son unión de creencias, religiones, ideologías, que pretenden sacar dinero.
Sí lo sabemos, somos de lo peor por no coincidir y por elevar al pensamiento crítico, basado en métodos científicos y sobre todo, la duda. Es la duda, el pensamiento más valioso, porque de ahí, uno puede cuestionar, investigar y tomar decisiones.