Dramatismo puro se vivió al silbatazo final con las lágrimas de los jugadores de Lobos, principalmente con un Carlos Adrián Morales que lucía inconsolable en la banca y varios jugadores del Monterreydando palabras de ánimo a sus rivales.
Al 16’, los licántropos estuvieron cerca del gol cuando Celso Ortiz retrasó un balón a Hugo González, quien al momento de tratar de despejar, estrelló la pelota en Quiñones y la pelota pasó muy cerca de la puerta albiazul.
El primer gol del Monterrey llegó gracias a una buena jugada elaborada en un cobro de tiro libre por derecha de Poncho González al área, Montes recentró de cabeza y delante de la media luna, Celso Ortizprendió la esférica de derecha con potencia para vencer al portero Canales y hacer el 1-0.
Los papeles cambiaron para el complemento, Rayados salió decidido a buscar su pase a la Liguilla y entre Pabón, Urretaviscaya, Albertengo y Carlos Sánchez quien ingresó de cambio, comenzaron a taladrar la zaga visitante que se había mantenido ordenada.
Sin embargo el empate se le presentó a Lobos en bandeja de plata tras una mano de Basanta en el área, pero Julián Quiñones no supo aprovechar el cobro al hacerlo anunciado y sin potencia para que lo rechazara Hugo González, lo que representó un duro golpe anímico para los del Borita al 70’.
Rayados olió la sangre de un lobo herido y agonizante, lo que aprovechó para matar de inmediato con un contragolpe que terminó con un autogol del Maza Rodríguez al 71’ para el 2-0 y luego por cortesía del silbante Marco Antonio Ortiz, quien marcó un penal inexistente sobre Albertengo.
Sin miramientos, Dorlan Pabón tomó la pelota y ejecutó perfecto para el 3-0 al 75’y Lucas Albertengo de cabeza puso el definitivo 4-0, para colocar el último clavo en el ataúd de Lobos BUAP.
