El café. Hay tanto que hablar de esta bebida, muchos no pueden iniciar su día sin una taza de café. Es un vicio oculto, el acompañante de una buena conversación, el sabor de una tarde lluviosa, el aroma de un hogar.
Un café bien hecho requiere de todo un ritual, y ahora, no solo debe de saber perfecto sino puede verse maravilloso. El Arte Latte es una manera de convertir una simple taza de café espresso en una bebida gustosa a la vista y sublime. Es la forma en que el barista se convierte en pintor, y tomando la leche espumada como acuarelas, la superficie oscura del café como lienzo y su técnica como pincel, es capaz de recrear imágenes increíbles.
El café latte es la presentación más utilizada para la ejecución de esta técnica; sin embargo, el cappuccino, el mocca y el macchiato también suelen ser la base.
Esta técnica ha dado un gran valor agregado a los negocios que sirven así una taza de café. Tal es el caso de My Cofi, donde el arte de un buen café alcanza su máxima expresión. Chang Kuei Fang es la dueña de esta cafetería y la responsable de convertir la espuma del café en una especie de dibujo en 3D que quiere salirse de la taza.
Chang Kuei Fang necesita solamente una fotografía para crear sus cafés en 3D y es capaz de recrear tanto animales, como dibujos y hasta insectos.
La artista tarda entre cinco y 10 minutos en hacer sus creaciones, cuyos precios parten desde los siete euros y pueden llegar hasta los 17 si el diseño es más complicado. Eso sí, para los que solo quieran disfrutar de una simple taza de café, también pueden hacerlo por unos tres euros.
Entre las peticiones, muchos clientes suelen optar porque les recreen a sus animales de compañía o personajes de ficción. Ve estás impresionantes obras de arte que son tan efímeras como un sorbo de café.
Con información de: El Periódico