La oposición no tiene quién le escriba.
Perdón por la cita, pero es verdad.
La oposición no sabe escribir su narrativa.
Este domingo se reunieron con el pretexto de la “marea rosa” para hacer público su descontento con la sobrerrepresentación de Morena, Partido Verde y del Trabajo en el Congreso de la Unión, empero, mucho grito para nada. Sólo para la foto, pero al final no sirve de absolutamente de nada.
Hace un año, hicieron lo mismo para decir que el INE no se toca y posteriormente para defender al Poder Judicial de la Federación (hoy cuestionado porque fue el encargado de liberar a Mario Marín, por cierto). Este año, unos días antes de las elecciones se fueron a rendir ante Xóchitl Gálvez y al final, el día de las votaciones, la “marea rosa” quedó hecha añicos.
La queja o sus inconformidades son legítimas, pero no las formas en las que se llevan a cabo. Este domingo, esa oposición, eligió con el 97 por ciento de los votos a Alito Moreno. Sí, un personaje que se ha enriquecido de forma inexplicable.
¿Javier Lozano Alarcón? Un gritón pendenciero de redes sociales que se encargó de dejar sin trabajo a los obreros de Luz y Fuerza del Centro en los tiempos de Felipe Calderón y que brinca del PRI al PAN sin recato alguno; que siendo vocero del panista Mario Riestra en su búsqueda por la alcaldía de la capital poblana salió a echarle porras al hijo de Tony Gali, ahora que es una estrella más del canal de las estrellas (Morena).
¿A poco los más de 690 panistas expulsados aquí en Puebla tiemblan porque ya no pertenecerán al partido blanquiazul?
Por Dios, les hicieron un gran favor.
Ahora, los acusados irán libremente a inscribirse a Morena o al Verde o al del Trabajo, o estarán cobrando en el próximo ayuntamiento poblano. Además, no hay de qué preocuparse, si algo ha hecho El Yunque desde su creación es pegar para cobrar, así le hicieron a Mario Marín cuando marcharon en contra y finalmente fueron comprados con obras públicas y contrataciones para los más cercanos a esa organización católica, apostólica y bien mona.
Los vimos cuando salieron a pelear por el tema de la despenalización del aborto, cómo terminaron exhibidos públicamente, un diputado porque le gusta corretear strippers y un secretario general estatal quien tiene la maña de tomar de la mano a las encargadas de la seguridad en su partido.
La misma denuncia extemporánea de Mario Riestra sobre los comicios del 2 de junio pone en evidencia la falta de expertise en su partido. Es muy fácil patalear, lo difícil es demostrar que existió un fraude sobre todo cuando a nivel nacional salieron a respaldar a Morena 35 millones de personas.
Es decir, en la suma de los errores del panismo y aliados pone en evidencia que no supieron ser opción de cambio, que la gente no les cree, que el círculo rojo está rebasado, que pueden correr ríos de twitter y la gente va a votar por conveniencia.
Es necesario regresar a comentarlo para que se den cuenta (difícil, hablar con un panista es como dialogar con la pared) que necesitan verdaderamente ser oposición.
En fin, sigamos viendo su telenovela que cada vez pierde adeptos.