Las lentejas en los bolsillos, la ropa interior amarilla, la maleta para correr por la cuadra, las doce uvas, el dólar o meterse debajo de la mesa puede sonar familiar para muchos en el país. Pero, ¿pasa lo mismo en otros países? Acá les contamos sobre algunas costumbres extrañas o normales en otras regiones del mundo:
Grecia
El primero en entrar a la casa traerá suerte para él y su familia. En este país, es común ver a las familias afuera de sus hogares antes de la medianoche. Suelen poner a los más pequeños a atravesar las puertas de primero. La tradición dice que deben entrar con el pie derecho y romper una granada (fruta), como símbolo de prosperidad.
Sudáfrica
En algunas ciudades es común ver que la gente tire muebles viejos por la ventana. La razón: sacar lo viejo y atraer cosas nuevas.
Finlandia
Algo curioso que sucede en este país es que muchas personas meten metales recién fundidos en agua fría con el fin de obtener una figura. Cuando se enfríe y después de medianoche, o al día siguiente, cada objeto representará algo que podrá dar luces de lo que sucederá en el nuevo año, como un corazón, anillos o barcos.
Italia
Las personas suelen ponerse estas prendas de color rojo con el fin de atraer la buena suerte, la fortuna y el amor. También, varias familias en algunas ciudades tiran ropa vieja por la ventana para deshacerse del pasado.
Croacia
Aquí hay una excepción en la cena de Año Nuevo: no se puede comer cangrejo ni langosta. Estos animales se mueven hacia los lados o hacia atrás, lo que, según dicen locales, podría significar contratiempos en el futuro.
Brasil
Como en otros países de la región, vestirse de blanco puede alejar las malas energías. En zonas costeras, es común ver ofrendas florales a la diosa del mar. También, quienes pueden, optan por meterse al mar la última noche del año para “limpiarse” de lo negativo.
Suiza
En este país, se suele recibir el año siguiente tirando un helado al suelo. Para varios suizos, esto significa buena fortuna. Es una tradición que ha pasado durante generaciones.
Japón
En Japón existe la tradición, sobre todo en aldeas o localidades más pequeñas, de asistir al primer amanecer del año nuevo. Se conoce como Hatsuhinode y suele hacerse desde algún punto especialmente destacado como playas o montañas. Mientras se contempla la salida del sol del primer día del año los asistentes suelen orar para pedir felicidad al año que empieza.
Con información de El Tiempo