Fernando Lozano | Forbes
La industria turística busca desarrollar su propio ‘Buen Fin Turístico‘ para estimular la actividad de su sector y acelerar la recuperación de sus empresas.
El proyecto busca que hacia finales de junio o principios julio se lance la campaña similar a la venta anual de finales de año, con el propósito de presentar ofertas en el mercado nacional e internacional para quienes estén en condiciones de realizar un viaje en los próximos meses o incluso deseen apartar su paquete para el próximo año.
“Necesitamos generación de alianzas empresariales, ampliación de plazos de las tarjetas bancarias a 12, 18 meses sin intereses y otros créditos al consumo y estamos creando algo que ha tenido mucho éxito, un ‘Buen Fin Turístico’, una especie de outlet de viajes para generar ingresos a las empresas, que hagamos preventas de servicios turísticos a bajo costo que permita a las empresas viajar durante el año. Esto creemos que puede ser de éxito, lo vamos a hacer vía virtual y presencial”, expuso Armando Bojórquez, presidente de la Asociación para la Cultura y el Turismo de América Latina (Actual) durante un encuentro virtual con las ministras de Turismo de Ecuador y Honduras.
En entrevista con Forbes, precisó que el plan aún se mantiene en fases preliminares, pero buscará implementarse en los próximos meses, hacia el inicio del segundo semestre del año, para cuando se tenga mayor claridad de la oferta de servicios que estará disponible. También se esperará a contar con los protocolos definidos por la autoridad para la operación del sector turístico.
En la promoción se promoverá la participación de aerolíneas nacionales e internacionales, cadenas hoteleras, restaurantes, arrendadoras de autos, navieras y agencias de viaje. Además, se buscará colaborar con la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur), que por 9 años ha organizado 10 ediciones de El Buen Fin.
“La gente podrá viajar de inmediato o precomprar con 6 meses o hasta un año de anticipación. Eso generaría ingresos a los hoteleros, les daría liquidez para operar”, comentó Bojórquez.
Sobre los métodos de pago, resaltó que prácticamente 2 de cada 3 viajes se pagan de contado en el país, por lo que llamó al sector financiero a sumarse a la reactivación de la actividad turística mediante promociones de meses sin intereses, puntos o bonificaciones.
El reto: la confianza de los turistas
Aunque se prevé que la reactivación económica en el país comience el 1 de junio próximo, los viajeros tardarán algo más de tiempo en recuperar la confianza en poder salir y realizar actividades lejos de su hogar y en espacios de interacción con muchas más personas.
“El mensaje no debe ser solo ‘queremos abrir’, sino convencer de manera absoluta a los turistas y a los gobiernos, que no pueden decretar un estado de confianza; la confianza hay que ganarla”, aseguró Antón Costas, Presidente de la Fundación Cercle d’Economia durante una reunión con la presidenta del Consejo Mundial de Turismo y Viajes (WTTC), Gloria Guevara.
Por ello, la industria turística tendrá que aumentar los protocolos de limpieza además de
“Muchos hoteleros dicen ‘vamos a abrir en junio’, está bien que abran pero ¿quién va a ir? La gente sin protocolos no se va a acercar a los hoteles. No se han establecido reglas seguras, no hay nada publicado de los protocolos ni la capacitación”, advirtió Bojórquez.
De acuerdo con el nuevo semáforo para reanudar actividades que lanzó el Gobierno Federal, la mayoría de actividades turísticas podrán desempeñarse en entidades que estén en nivel de alerta medio (amarillo). Sin embargo, hasta el pasado 12 de mayo, las entidades que más turistas atraen en el país como Quintana Roo, Guerrero y Baja California Sur se encontraban en nivel máximo (rojo) y mientras que Jalisco, uno de los principales destinos para vuelos desde EU, se encontraba en nivel bajo (verde).