Frases como “solo por hoy”, “hoy no”, “para la otra”, o simplemente decir “no, gracias, ya no tomo” serán parte de tu vida, ¿crees que sea difícil?
Si te dio curiosidad esta nota quizá sea porque tienes cruda y estés pensando en que ahora sí ya te pasaste, esta fue la última peda, ya no vuelves a tomar o simplemente por salud quieres dejar de tomar para siempre. Antes de que lo hagas conoce estos 10 beneficios que podrás lograr si lo llevas a cabo.
- Te asombrarás de todo lo que ocurre los domingos por la mañana; tendrás el placer de levantarte de la cama sin ningún malestar estomacal o dolor de cabeza, ni con las terribles nauseas. Conocerás otras opciones de desayuno y tendrás más tiempo para hacer lo que quieras.
- Las cosas sabrán mejor: encontrarás sabores más intensos y diferentes en tus alimentos, lograrás comer o tomar cosas de las que antes te privabas por miedo a la irritación estomacal.
- Serás centro de atención: las personas por instinto suelen criticar sea bueno o malo y, sí, nos queda claro que si antes beber alcohol o consumir drogas estaba visto como mal para ojos de muchos (todos), pues ahora no hacerlo o al menos no consumir alcohol está aún peor, y preguntas como estas serán parte del proceso: «¿neta no tomas?», «¿a poco ni una?», «¿estás jurado?», «¿y cómo le haces?», «¿no se te antoja?», «¿no te aburres?», «¿qué te pasó o qué hiciste para dejar de chupar?». Y tendrás que explicar una y otra vez cuando decidas dejar de tomar, así que prepárate. Después ya será normal.
- Te será tedioso: al principio te aburrirás pues estás acostumbrado asistir a lugares de fiesta o chupe y no encontrarás sentido de estar ahí. Pero tranquilo: después te burlarás de los borrachos o te pondrás a pensar si eso tú lo hacías; encontrarás otras formas de divertirte y conocer más personas.
- Dejarás de sentir culpa: «¿qué paso ayer?», «¿con quién me besé?», «¿cómo llegue a mi casa?», «¿por qué me gasté tanto dinero?», «¿qué habré hecho?». Estas preguntas dejarán de estar presentes y de atormentarte, desaparecerá la cruda moral y eso te dará paz mental, aunque lo dudes.
- Tendrás claridad: pensarás mejor las cosas, los conflictos emocionales se reducen si sabes que el alcohol es depresor del sistema nervioso, y al dejar de haber esta sustancia en tu cuerpo lograrás pensar con tranquilidad.
- Adiós a las acciones tóxicas: cuando bebemos inconscientemente cometemos muchos errores, como llamar a tu ex, hacer algún desfiguro, ser objeto de burla, pelear sin razón, llorar por recuerdos. Dejarás de esconderte atrás de tus impulsos y de tomar valor inconsciente, ahora enfrentarás las situaciones con mayor madurez y coherencia, y tu dignidad estará segura y no perdida en alguna bolsa de pantalón o de mano.
- Tendrás amigos de verdad: a lo mejor has pasado horas platicando con alguien que conociste en el baño, incluso hasta llorar tus penas con el mesero; dejarán de estar presentes esas personas que solo te buscan por interés y solo estarán los buenos amigos para las buenas y las malas, que quieren lo mejor para ti y estarán ahí para apoyarte sin dudarlo.
- Mejora el sexo: tus nervios, tus cinco sentidos y hasta tu estado de ánimo estará mucho mejor ya que tus sensaciones no se verán atrofiadas, serán más intensas y placenteras y aparte perderás kilos de más.
- Sentirás un gran logro: si bien sabemos que no es fácil dejar un habito que ha estado presente en tu vida diaria, si eres de las personas con el habito y todo lo asocias a fiesta, bares o ligues espontáneos será más que obvio que querrás volverlo hacer, pero aférrate a tu decisión; ten en mente el motivo por el que decidiste dejar a un lado el vicio. Cree en ti.
Quizá ya pasaste la línea de bebedor social y ya seas un poquito alcohólico, pero recuerda que tu salud, tu dignidad y tu integridad es primero.