Texto recuperado de nuestra edición Noviembre/Diciembre 2012
El ser humano, en su constante curiosidad, trabaja horas extra dando fin e inicio a épocas. ante la reciente obsesión con el fin de los tiempos, astrólogos, futurólogos, religiosos y curiosos en general intentan ponerse de acuerdo. por eso, preguntamos a una serie de expertos en diversas materias esotéricas y hasta charlamos con el representante de una secta, para conocer qué ocurre realmente con el apocalipsis. ¿se acerca el fin de la civilización humana? ¿estamos al borde de una nueva era?
Karla Cruz es vidente y se dedicada a la astrología esotérica desde hace 39 años. Para ella, la catástrofe que se ha insinuado desde hace tiempo y que está programada para el 21 de diciembre de 2012, no sucederá. Más bien, ocurrirán ciertos cambios atmosféricos, de tal manera que harán que la humanidad tome conciencia del lugar que habita para que cuide mejor de él.
“No va a haber fin del mundo. No vamos a estallar. No nos vamos a morir. Vamos a tener unos cambios atmosféricos muy severos; habrá ciertas alineaciones de elementos a nivel universal; sucederán algunos eventos porque nuestro planeta Tierra se tiene que purificar, ya que está en una olla de presión. Hay que tratar de vivir cada día, así nos queden uno o dos, puesto que nadie sabe cuándo se va a acabar. El fin del mundo lo tenemos cada ser humano cuando dejamos de existir y cerramos los ojos para siempre.”
Así como hay seres humanos que pueden tomar a broma el fin de los días, puesto que se ha escuchado desde años atrás y nada ha sucedido, hay otros que pueden llegar al fanatismo, e incluso preferir quitarse la vida que enfrentar la extinción humana.
“Hay que creer, pero sin llegar al fanatismo. Existen maneras de averiguar acerca de lo que puede pasar en el futuro, pero hay que decir que muchas personas lo utilizan a su conveniencia, sin importar que dañen a terceros. Es mejor que las personas se olviden de todo esto y no se dejen llevar por una creencia falsa, porque ¿cuántos no se han suicidado en masa? La superstición no es recomendable, porque te puede quitar la vida.
“El fin del mundo no se manifiesta para este diciembre. Posiblemente –y me adelanto a decirles– van a tener que pasar 20 o 30 años más para que se vayan depurando todavía más los continentes y, de esa forma, vaya creándose una nueva fe, una nueva armonía espiritual, pues después de que ocurre una catástrofe, muchos se acercan a Dios.
“El único fin es cerrar los ojos”
“No se alarmen, todavía habrá inundaciones, erupciones volcánicas, movimientos inesperados, incluso algún atentado, pero hay que pedir por aquellas personas que son buenas para que los proteja el Señor. Además, un suceso que se ha comenzado a dar desde mediados de noviembre y hasta principios de enero de 2013 es que habrá exceso de tristezas por diversas situaciones, las cuales pueden terminar mal, y eso hay que evitarlo. El volcán nos puede dar sorpresas otra vez, pero sin lastimarnos. Se va a desarrollar otro virus más fuerte que dañe la salud, y para el próximo año se tendrá mayor control sobre el sida, pues se generará un tratamiento que ayudará mucho a quienes padecen esa enfermedad.”
Karla Cruz abona a la esperanza. Sostiene que el 2013 representa un número par, el cuatro, el cual significa que el próximo año será uno en el que el ser humano estará en unión con su semejante. La astróloga concluye que el fin del mundo es cambiar los malos sentimientos por los buenos, actuar bien y ayudar a quien en verdad lo necesite.
“Es el inicio de un nuevo mundo, el inicio de nueva fe. Vamos a entrar en una etapa que es la era de la fe, de la humanidad. Vamos a llegar a un fin de malas acciones. Esta va a ser la primera parte del cambio. Las situaciones vividas actualmente son para aprender, y debemos estar unidos y pedirle a Dios por todos sin importar la religión que cada quien profese.”
“Un nuevo día vendrá”
“El mundo se va acabar, si un día me has de querer te debes apresurar”, cantaba Molotov en 1999, año en que también se hacían especulaciones sobre el fin del mundo: las computadoras tendrían problemas en sus bases de datos por el cambio de 1999 a 2000. Se hablaba, entonces, del Y2K, una catástrofe informática que repercutiría en todas las actividades humanas: los ricos se volverían pobres, los días estaban contados… Pero no pasó nada.
Unos años después la historia se repite, y se habla de las famosas profecías mayas, de una hecatombe que no dejará rastro alguno de vida humana, y también de la llegada del Apocalipsis. Sin embargo, para Víctor Miguel Sánchez Zárate, Custodio Guardián del Altar de la Santa Muerte, adonde acuden personas de toda “UN NUEVO DÍA VENDRÁ” clase social a rezarle a “La Flaquita”, las predicciones acerca del fin del mundo –que se presume será este diciembre del 2012– “son parte de la leyenda de una cultura que no vivimos”.
“En un futuro también especularán sobre las predicciones que se hayan hecho en este tiempo”, afirma Sánchez Zárate. “El mundo se acaba cuando fracasamos en un negocio, una meta, o fallece un familiar. Podría decirse que es de manera individual”.
El Custodio Guardián explica que especular sobre el futuro es parte de la cultura de la humanidad, pero, para él, el fin del mundo representa “una renovación, la cual sólo es posible con la llegada de un día nuevo, y será la Santa Muerte nuestra guía hacia la vida eterna”.
Por Jesús Ramírez Viñas | Jorge Patiño |