Si sólo tienes pocos días de vacaciones, te recomendamos elegir un lugar que sea fácil de recorrer y que te ofrezca la tranquilidad que buscas lejos de tu trabajo. Tomar unos días de descanso es importante para tener una buena salud mental y evitar el burnout. Nadie quiere acabar siendo un esclavo de su rutina, quedando tan cansado que solo puede pensar en dormir al llegar a casa.
Si no tomas breaks te arriesgas a convertirte en un zombi corporativo, poco productivo y funcionando solo gracias al exceso de café. Unas vacaciones, por más cortas que sean, son el boost necesario para regresar a la oficina listo para afrontar cualquier reto.
Estos Pueblos Mágicos que verás a continuación los podrás conocer en un solo fin de semana. Aunque son pequeños, tienen una gran riqueza histórica, cultural y gastronómica. Son los lugares que debes conocer antes de pensar en destinos internacionales.
Cholula, Puebla
Horas de viaje: A 2 horas de la ciudad de México y a 15 minutos de Puebla Capital
Puebla tiene mucho para ofrecer a sus visitantes, y Cholula es la cereza del pastel. Aquí encuentras la zona arqueológica y la pirámide de Cholula, considerada la más grande del mundo, y el santuario de la Virgen de los Remedios, construido durante la conquista y los portales de la Plaza Principal. Además, si vas en la temporada correcta, puedes presenciar el tradicional concierto de campanas y el ritual a Quetzalcóatl o, en el mes de septiembre, la Feria Regional Piloto de Cholula.
Aquí no te quedas con el antojo de nada, ya que existe una extensa oferta gastronómica. Puedes encontrar desde un desayuno gourmet o vegano hasta un delicioso corte argentino. Y para terminar el día con broche de oro, visitar sus bares y pubs.
Taxco, Guerrero
Horas de viaje: 2 horas desde la Ciudad de México
Este lugar te encantará por sus casitas blancas con tejas. Su lindo paisaje lo puedes disfrutar desde las alturas, subiendo al Teleférico de Montetaxco; el pasaje redondo tiene un costo de $95. Taxco es famoso por su plata, así que te recomendamos buscar lugares bien establecidos y hacer una pequeña inversión, tienen precios muy accesibles.
Visita el cerro Atachi para conocer el Cristo Monumental de 3 metros de altura. Para recorrer está: el ex-convento de San Bernardino, el Museo Spratling, la Casa Humboldt y por supuesto no te puedes ir sin bajar a sus famosas grutas para una aventura.
Tienes que comer en Taxco: el típico Mole Rosa, preparado a base de piñones y pétalos de rosas.
Tepoztlán, Morelos
Horas de viaje: 2 horas desde la Ciudad de México
Lo que no te puedes perder: El cerro del Tepozteco es la atracción principal, pero hay muchas cosas que debes ver aquí, como la Iglesia de San Miguel, con su fachada forrada de semillas, el museo del ex-convento de Nuestra Señora de la Natividad y el museo de Arte Prehispánico Carlos Pellicer Cámara. En Tepoztlán hay muchos lugares con temazcal, aprovecha y entra a uno para vivir la experiencia, algunos incluyen masajito.
Es indispensable probar los platillos prehispánicos en alguno de sus restaurantes típicos y visitar el mercado donde puedes encontrar desde dulces típicos hasta artesanías hechas a mano.
Bernal, Querétaro
Horas de viaje: aproximadamente 2 horas y media desde la Ciudad de México
Este Pueblo Mágico es uno de los favoritos de los amantes del vino, así puedes ver la Capilla de las Ánimas y su teatro al aire libre, practicar escalada y rapel en el monolito de Peña de Bernal (con guías expertos que te van a ayudar), hacer un recorrido por las casonas construidas durante el siglo XVII y visitar los viñedos de la ruta del vino.
Malinalco, Edo. de México
Horas de viaje: 1 hora y media desde la ciudad de México
Malinalco está muy cerca de la CDMX y llegar no es nada complicado. Una vez ahí, puedes ver la pirámide Casa de las Águilas y los Tigres, tallada sobre la montaña, el ex convento de la Transfiguración del Templo del Divino Salvador de la época de la conquista, hacer un recorrido por el tianguis de productos locales, visitar el Cerro de los Ídolos y la Zona Arqueológica de Cuauhtinchan y las exposiciones de la Casa de la Cultura. Puedes admirar la vista desde el Cerro de las Tres Cruces y, si eres fanático de la historia, no te puedes perder las pinturas rupestres en la cañada del río Tepiloca. El nombre de este pueblo significa “Donde se adora a Malinalxóchitl, la Flor del Malinalli”
Xico, Veracruz
Horas de viaje: 4 horas desde la ciudad de México
Café y buena comida te esperan en este pueblo, donde puedes ver el museo de la parroquia de Santa María Magdalena, hacer un recorrido por sus edificios de arquitectura colonial, barroca y neoclásica, conocer los portales del siglo XVII, la Xiqueñada, que es una pequeña réplica de la Pamplonada donde sueltan a los toros por las calles del pueblo, y la fiesta del pueblo que se celebra en el mes de julio. Tienen que probar el tradicional mole de Xico que es reconocido internacionalmente y el café. Los más extremos pueden hacer un recorrido en bicicleta de montaña, hacer senderismo y ascender al Cofre de Perote.
Huasca de Ocampo, Hidalgo
Horas de viaje: 2 horas desde la Ciudad de México
Este pueblo es ideal para relajarte y explorar. Aquí encuentras las Ex-Haciendas de San Miguel Regla y Santa María Regla construidas en el siglo XVIII y los Prismas Basálticos que se encuentran al pie de la cascada de la presa de San Antonio. También puedes hacer un recorrido por el centro a bordo del tranvía y hospedarte en una de las cabañas del parque ecológico El Huariche, donde puedes practicar senderismo, rapel o acampar en la reserva de Barranca de Aguacatitla.
Fotos: Cortesía Con información de: GQ